Las empresas más innovadoras posicionan a las personas en el centro y comprenden que la salud es vital, valoran la importancia de construir entornos con certificación WELL para elevar la productividad, atraer y retener el talento.
El certificado WELL es un sistema de puntuación mundial, que identifica, mide y monitoriza las características basadas en la salud y en el bienestar de las personas en los edificios.
El certificado WELL establece diez conceptos para valorar los factores relevantes en la salud, en el bienestar y en la productividad.
la calidad del aire interior está estrechamente ligada al aumento de la productividad. La ventilación, la elección de los productos de limpieza, la calidad del sistema de filtrado y la presencia de plantas de interior pueden ayudar a mejorar la calidad del aire.
Una buena hidratación mejora la calidad del sueño y aumentará la concentración. Concientizar sobre la importancia de hidratarse correctamente y facilitar el acceso al agua filtrada hará que baje el consumo de bebidas azucaradas.
Somos lo que comemos. Dotemos a la oficina de espacios donde comer conscientemente. Promover los buenos hábitos alimenticios y los alimentos saludables, como la fruta o la verdura, mejorará el rendimiento y evitará enfermedades.
Priorizar la luz natural, controlar el deslumbramiento y utilizar una iluminación adecuada en cada puesto mejora el estado de ánimo y la disposición de las personas.
Practicar un deporte aumenta la concentración, la energía y el estado de alerta. Dotar las instalaciones con mobiliario activo. Disponer de un aparcamiento de bicicletas es una propuesta muy sostenible y saludable.
Regular la temperatura y la humedad a través del uso de termostatos garantiza unas condiciones de trabajo satisfactorias.
El ruido es un gran perturbador que dificulta la concentración y hasta puede llegar a afectar el oído. Instalando paneles fonoabsorbentes y cabinas acústicas conseguimos espacios más cómodos.
Eliminar los materiales de construcción tóxicos, utilizar productos de limpieza ecológicos y libres de sustancias tóxicas y gestionar adecuadamente los residuos mejora la calidad ambiental.
La presencia de plantas de interior, un jardín o una terraza en la azotea nos conecta con la naturaleza y fomenta la buena salud emocional y aumenta la creatividad y la concentración.
Es importante crear una comunidad inclusiva e integrada a través de la justicia social, el compromiso cívico y el diseño accesible.
Un edificio con certificado WELL aporta múltiples ventajas en términos medioambientales, de salud y bienestar, genera ahorro en los costos operativos y consigue una mayor valoración del inmueble.
Las personas son el eje primordial y el principal activo de las empresas.
Disponer de un entorno laboral saludable supone un aumento de la felicidad y de la satisfacción de los empleados, que se sienten orgullosos de las instalaciones y contribuyen a mejorar la reputación.
Un edificio de oficinas WELL reduce las emisiones de CO2 y los consumos de agua, aumenta la productividad y la igualdad entre sus usuarios y permite atraer y retener talento.
El sello otorga un valor reconocido internacionalmente que demuestra el especial compromiso y la responsabilidad con las personas y con la sociedad.
Si te interesa este servicio de consultoría y certificación de espacios en sostenibilidad, salud y bienestar para tu empresa, no dudes en enviarme un correo electrónico, llamarme o enviarme un mensaje completando el formulario de abajo.